En lo más profundo de una casa adyacente a la de Leda, Pompeya revela un tesoro: un fresco que representa el mito de Friscus y Elle. En la obra de arte, Elle apenas es visible, con su rostro apenas emergiendo del agua, mientras su brazo derecho se extiende hacia Friscus, aferrado al carnero con el vellocino de oro. Este fresco, uno de los clásicos más queridos de la mitología griega, cuenta la historia de hermanos obligados a huir de su madrastra, con Elle finalmente cayendo al mar y pereciendo.
El director del parque arqueológico, Gabriel Zuchtriegel, describió el fresco como estando en excelente estado, elogiando su belleza en colores, vivacidad y ejecución. Se especula que podría haber sido creado en el mismo taller activo en la casa de Leda, o quizás por encargo único.
A medida que continúan los trabajos de excavación, la casa de Leda sigue revelando más secretos. Aunque el atrio y el área hacia la calle han sido completamente explorados, el trabajo de excavación continúa en los lados restantes, con el fresco emergiendo en la casa del sur. Anteriormente, en la casa del norte, se habían encontrado grupos de estatuillas, que ahora están siendo restauradas.
Zuchtriegel enfatizó el alcance extenso de los proyectos en curso, con 28 iniciativas que incluyen tanto restauración como medidas de seguridad. Actualmente, 11 de estos proyectos están en etapas iniciales, mientras que otros están en fase de planificación, con una inversión total que supera los 100 millones de euros. También destacó que el verdadero costo no radica solo en la excavación, sino también en el mantenimiento y la preservación del patrimonio descubierto. Cada artefacto desenterrado debe ser restaurado, preservado y puesto a disposición de las generaciones futuras, un compromiso que se extenderá durante los próximos 100 años y más allá.